LA VENTANA ABIERTA...

Dejas una ventana abierta y las páginas del libro de tu vida corren borrosas arrastradas por el tiempo.
Mirarnos al ombligo no es una buena costumbre, es algo que aprendimos en el principio cuando teníamos una eternidad por delante, ahora cada segundo hay que saborearlo y nos inclinamos por dejar nuestras huellas en todo lo que hacemos como testimonios de nuestra férrea voluntad.

Comentarios

Entradas populares de este blog

MI ESPOSA CAMBIÓ SU FOTO DEL PERFIL

CARTA DE UN HOMBRE A LAS MUJERES

¿QUE SI TE QUIERO?